Una Casa en La Chimba

En la esquina de Bellavista con Recoleta, frente al ir y venir cotidiano de uno de los barrios más antiguos de Santiago, existe una puerta que lleva más de un siglo y medio abriéndose al servicio. Es la puerta del cuartel de la Octava Compañía del Cuerpo de Bomberos de Santiago. No se trata de un museo ni de un edificio ceremonial. Es una casa viva, nuestra casa grande.

Y este 24 y 25 de mayo, abriremos esa puerta para compartir contigo algo que no siempre se ve: el alma de una vocación.
Fundada en 1863, la Octava fue parte del nacimiento del Cuerpo de Bomberos de Santiago y ha acompañado desde entonces, los momentos más difíciles y decisivos de la ciudad. Emergencias en mercados, incendios estructurales, catástrofes naturales, pandemias y rescates imposibles…hechos posibles.
La Octava ha estado ahí, a veces en la primera línea, otras en la retaguardia, pero siempre presente, con su batería humana y técnica; potente, poderosa.
Desde hace décadas, nuestra historia se entrelaza con la del barrio de La Chimba: una zona antigua, pero inquebrantable. Allí, donde la ciudad late con más humanidad que pretensión, la Octava encontró un lugar al cual pertenecer. No para habitar, sino para servir.
Nuestro cuartel también guarda memoria. En sus paredes no sólo cuelgan imágenes de máquinas y formaciones.

También están presentes los que no volvieron, nuestros mártires Víctor Hendrych Husak y Enrique Fedes Zuñiga, quienes partieron a causa de actos del servicio. Sus nombres no son parte del pasado. Son parte del compromiso diario. Son el recordatorio de que aquí, cuando se habla de entrega, no es una metáfora.

La Octava fue también pionera. Fue la primera compañía del Cuerpo de Bomberos de Santiago en integrar mujeres a sus filas. No como símbolo, sino como consecuencia natural de una verdad sencilla: la vocación no distingue género, sólo voluntad. Hoy, su presencia en nuestros cuarteles es parte de la normalidad operativa, sin distinciones ni etiquetas, porque servir es una decisión que nace de la vocación.
Junto a ellos, crece también nuestra brigada juvenil: Un semillero de bomberos, que, bajo disciplina, respeto por nuestra comunidad, cultura, y cuya formación no busca aplausos, sino continuidad, estos jóvenes aprenden —desde temprano— que cuidar a otros puede ser más urgente que velar por uno mismo.

Este fin de semana, desde las 10:00 hrs. y hasta las 17:00 hrs., la Octava abre sus puertas. Lo hace sin espectáculo, sin artificio, sin guion. Lo que ofrecemos es sencillo y con cariño: entrar en un lugar donde la vocación aún importa. Donde las cosas se hacen por convicción, no por obligación. Donde cada turno, cada guardia y cada salida están atravesadas por una idea antigua, como la vida misma, pero vigente: que estar al servicio de los demás es una hermosa forma de vida.

No todos conocen nuestra casa. Pero todos, en algún momento, han necesitado lo que en ella se gesta.
Este 24 y 25 de mayo, por el Día del Patrimonio, el umbral estará abierto. Ven, te invitamos a cruzarlo. Quizás descubras algo más que un cuartel: descubras el corazón de una ciudad como Santiago,  que late en el pecho de nuestros voluntarios, voluntarias y brigadieres. y que, en silencio, aún sabe cuidarse a sí misma.

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Dónde: Octava Compañía de Bomberos de Santiago
Bellavista 594, esquina Recoleta – Comuna de Recoleta

Cuándo:
Sábado 24 y domingo 25 de mayo
De 10:00 a 17:00 hrs.

Una invitación a conocer lo esencial: una vocación encendida desde 1863.

Te esperamos!